sábado, 22 de enero de 2011

Educación Virtual






Ninguna disciplina del quehacer humano ha sido más afectada en la historia por los grandes cambios tecnológicos que la educación. Desde la invención de la escritura, los seres humanos con vocación educadora han utilizado todas las herramientas tecnológicas a su alcance para enriquecer el proceso educativo y propagar eficazmente el conocimiento.

Cuando surgió la revolucionaria innovación de la imprenta, se estableció rápidamente el primer sistema de “educación virtual”: el libro. Esta eficaz herramienta tecnológica introdujo un nuevo concepto en la educación al permitir que el discípulo recibiera todo el conocimiento del maestro aunque ambos estuvieran a miles de kilómetros en el espacio o a cientos de años en el tiempo. Hoy en día ningún educador duda de las bondades de invitar a los autores de sus libros favoritos como “profesores virtuales” de su aula.

Si la imprenta fue el invento más influyente y revolucionario del milenio pasado, sin duda el que hasta ahora lleva la delantera en cuanto a impacto y perturbación del mundo que conocemos se llama Internet. Naturalmente, la educación ha sido la primera en tomar nota de su llegada y la pionera en poner a su servicio esta red mundial de comunicación y conocimiento. Innumerables aplicaciones y usos novedosos han surgido en el ambiente universitario y han sido acogidos inmediatamente por estudiantes y profesores ávidos de incorporar a su clase lo último en tecnología.


Sin embargo, los esfuerzos personales de algunos se ven muchas veces frenados por el ritmo diferente en el que evolucionan las instituciones educativas a las que pertenecen. El objetivo del presente documento es llamar la atención a las universidades sobre la importancia de acoger y fomentar el uso de las nuevas tecnologías de comunicación y manejo de la información en las aulas de clase, ya sea como complemento de los cursos presenciales o como fundamento de nuevos cursos completamente virtuales.

Para una exitosa implantación de los conceptos y herramientas de la educación virtual todos los usuarios (profesores, alumnos, directivos) deben reconocer y comprender el inmenso cambio cultural que se está presentando en el proceso educativo, aprender a convivir con él y capacitarse para aprovechar al máximo sus ventajas.

Este es un camino que no tiene marcha atrás y que es preciso tomar con prontitud, ya que la comunidad educativa lo está exigiendo con impaciencia. 

¿Por qué educación virtual?



Existen muchas definiciones de educación virtual o del reiterado término “e-learning”. Todas involucran una ecuación muy simple: (Educación + Internet). La mayoría plantean la distribución de contenidos en múltiples formatos electrónicos, la creación de una comunidad interconectada de estudiantes y profesores y la administración y control de toda esta experiencia educativa.

La tecnología ha cambiado fundamentalmente el proceso de educación de las personas. El conocimiento ya no está reservado a quienes tienen acceso a la información reposada en bibliotecas y facultades. En la actualidad, cada persona debe jugar un rol activo en su adquisición de conocimientos sin depender de los demás. El crecimiento y desarrollo profesional así como la actualización permanente de sus capacidades son el resultado de la decisión de cada individuo de mantenerse vigente y competitivo. Hoy más que nunca el término “autodidacta” ha cobrado validez y los educadores tienen que enfrentar a una comunidad de alumnos más exigente y autónoma.

Internet tiene la habilidad de nivelar el campo de oportunidades para todos. Ya sea que se trate de un alumno de secundaria buscando la respuesta a un problema de geometría o de su padre atendiendo las exigencias de un programa MBA en línea, las posibilidades son ilimitadas y la oferta es cada vez más extensa. A medida que las posibilidades de conexión mejoran y la tecnología de administración y creación de cursos se hace más accesible, la demanda de servicios de educación virtual seguirá creciendo exponencialmente.

¿Quién necesita la educación virtual?




El primer público natural para los programas de educación virtual es aquel que ya se encuentra vinculado a las empresas y necesita terminar sus estudios de pregrado o mejorar su competitividad laboral con estudios de posgrado. Tecnológicamente preparado y conectado, este grupo no tiene ningún inconveniente en estudiar a través de Internet, ya que sus exigencias laborales o su situación geográfica hacen imposible que puedan asistir regularmente a un centro educativo.

Sin embargo, existen muchos grupos de personas que están listos para decidirse por la opción de la educación virtual:
-        Madres de familia que no desean desactualizarse profesionalmente mientras atienden los primeros años de sus hijos.
-        Personas con limitaciones físicas que les impiden presentarse diariamente a una institución educativa.
-        Exalumnos en el exterior que desean terminar o continuar sus estudios en su facultad.
-        Miembros de las fuerzas armadas o de comunidades religiosas asignados a localidades remotas.
-        Empresarios retirados, profesionales jubilados o personas de edad que no se encuentran cómodos en el ambiente juvenil de un campus universitario.
-        Servidores públicos que por lejanía o por seguridad no pueden desplazarse fácilmente a una universidad.
-        Jóvenes bachilleres de poblaciones pequeñas que no tienen los recursos económicos para viajar a la capital de su departamento o no pueden abandonar su municipio.

¿Qué se puede hacer por medio de la educación virtual?



Los niveles de sofisticación de los cursos virtuales pueden variar, pero generalmente incluyen contenidos básicos (textos y gráficos), ejercicios de autoevaluación, exámenes, tareas de investigación, temas de discusión y trabajos en grupo.

Muchos cursos van más allá y aprovechan el hecho de que el alumno está frente a un computador para incluir gráficos animados (“Así funciona un reactor nuclear...”); simulaciones interactivas (“Observe la trayectoria de su proyectil con la inclinación y velocidad dadas...”) fragmentos de audio, (“Escuche la forma en que se pronuncia esta frase...”) o de video (“...de esta forma aprovechamos la luz ambiental...”).

Sin embargo, cuando se intenta diseñar una experiencia educativa es claro que las más exitosas son aquellas que se basan en crear una comunidad. Reunida la comunidad, ésta se verá enfrentada a diversos contenidos preestablecidos o espontáneos que al final generarán conocimientos en cada uno de los participantes.

A lo largo de la historia, la educación siempre se ha basado en la creación de comunidades. Por más que se trate de un conocimiento muy puntual o práctico, el ser humano siempre ha preferido que alguien le diga cómo se hace o le explique la lección. Toda actividad de educación que esté desligada de la socialización se vuelve fría y mecánica. Muy lejana de lo que desearíamos y ciertamente muy aburrida.

Es posible que algunos de los estudiantes prefieran trabajar solos y ser autodidactas, pero eso no se diferencia de leer un libro o navegar buscando información en Internet. A esa experiencia no la podríamos llamar realmente un curso virtual, sino simplemente un documento electrónico por el que pasan lectores. 

Parte del éxito que ha tenido la educación virtual está en que se basa en este principio. Primero hay que reunirse para luego aprender. Y reunirse significa conocerse, participar, aportar y obtener de los demás. Los cursos exitosos centran su esfuerzo en establecer un clima de confianza y colaboración para, a partir de allí, empezar a recorrer los temas que se proponen aprender.

Algunas de las estrategias para crear un ambiente interactivo en un curso virtual incluyen: estudios de casos, narración de experiencias, demostraciones, juegos de roles, simulaciones sociales, grupos de discusión, carteleras de avisos, talleres asistidos, y tutorías personalizadas.

Se pueden crear ambientes más estimulantes y promover mejor el razonamiento crítico en grupos de trabajo virtuales que en un gran salón de clase conducido por un profesor.


¿Qué ventajas tiene la educación virtual?

   
Dentro de las razones que se mencionan para considerar la educación virtual, como una alternativa seria y presente, están la reducción de costos, el acceso de nuevos públicos a la tecnología y el mayor compromiso de todos los participantes en el proceso educativo.

Varios elementos se destacan en este nuevo esquema de aprendizaje:

Exploración – El uso de Internet, o más precisamente la “World Wide Web”, como una herramienta de exploración le abre al profesor y al estudiante las puertas de una fuente inagotable de información y recursos.


Experiencia – El estudiante virtual se ve involucrado en una nueva experiencia social y de aprendizaje que puede incluir comunicaciones directas con su profesor, discusiones con sus compañeros de curso o estudio individual de contenidos a su propio ritmo.

Compromiso – Los cursos virtuales ofrecen una oportunidad única al estudiante de compartir experiencias con otros, lo que refuerza el sentido de colaboración y de comunidad. Además el estudiante recibe el control de su tiempo y sus recursos y puede escoger el mejor camino de aprendizaje de acuerdo con sus preferencias y capacidades.

Flexibilidad – Desde cualquier lugar y a cualquier hora, los estudiantes pueden tener acceso a sus cursos virtuales. Se estima que aproximadamente 80% de las empresas ya tienen solucionado su acceso a Internet, por lo que los obstáculos técnicos de acceso de los estudiantes que trabajan ya están superados.

Actualidad – Los profesores tienen la oportunidad de actualizar sus materiales y temas de discusión instantáneamente lo que hace que los cursos se mantengan frescos y consistentes con la actualidad.

Personalización – Aunque parezca contradictorio, la educación virtual sí permite un contacto personal entre el profesor y el alumno. El intercambio de mensajes escritos y la posibilidad de seguimiento detallado del progreso proporciona al profesor un conocimiento del alumno muchas veces mayor que en cursos presenciales.

Cómo es un curso virtual?


La pieza básica de la educación virtual, al igual que en la educación presencial, es el aula virtual. ¿En qué consiste? Se trata de un sitio de reunión. Así de simple.

Privada, temporal, con un objetivo específico (o sin ningún motivo particular), el profesor y los estudiantes deciden lo que quieren hacer dentro de ella. Cada curso es un evento único y así como puede haber elementos y materiales predeterminados, el desarrollo del curso es impredecible.

Las aulas virtuales, al igual que en el ambiente real, son lugares independientes con contenidos propios y participantes únicos. Cada una es un mundo aparte capaz de reflejar el estilo propio de cada profesor y la dinámica del grupo de alumnos que comparten dicha aula en un periodo de tiempo determinado.

El profesor cuenta con herramientas de trabajo simples pero poderosas durante el diseño de su curso virtual. Por ejemplo, puede conducir al estudiante:
-        a examinar un elemento de contenido dentro del curso (archivos de texto, imágenes, videos o audios que el profesor ha incorporado al curso)
-        a visitar una dirección en la Web (un enlace externo al curso)
-        a participar con su opinión en un foro de discusión y examinar los aportes de los demás alumnos
-        a contestar una serie de preguntas sobre el tema y comprobar su comprensión.

Toda la información que el profesor agregue al curso se mantiene en su aula virtual. Es equivalente a pensar en un salón de clase en el que la noche anterior el profesor escribe en el tablero su lección, deja en cada pupitre un documento para que lo analicen los alumnos, inicia un tema de discusión en la cartelera y prepara un cuestionario para que lo contesten.

Al día siguiente los alumnos ingresan al salón de clase. Cada uno tiene una clave personal que le permite el acceso y puede entrar a cualquier hora. Uno por uno van realizando lo que les indicó el profesor y luego se van. Si coinciden varios en el salón de clase pueden iniciar una charla y compartir sus puntos de vista. Si el profesor está presente en ese momento, puede contestar las preguntas de los alumnos inmediatamente. Si no es así, las preguntas quedan en el buzón del profesor hasta que éste las resuelva.

Profesores y alumnos cuentan con buzones de correo electrónico personales para el intercambio de mensajes permanentemente. Cada vez que el profesor regresa a su aula encuentra las actividades desarrolladas por los alumnos y prepara el trabajo de la siguiente sesión.

Existen además otras herramientas como un glosario de términos que puede ser enriquecido en forma dinámica a medida que el curso va madurando. También los alumnos pueden crear páginas de información personal que les permiten presentarse ante los demás y al profesor.

Como es natural, el profesor puede elegir usar una o todas las herramientas disponibles, de acuerdo con su estilo pedagógico personal. El profesor es el que controla la tecnología y no el que debe subordinarse a ella .

Juegos Educativos


Boaki: 

Estimular la reflexión en los niños

Boaki es un juego interactivo online que ha sido concebido para estimular la reflexión de los niños. Este juego infantil, creado para satisfacer la necesidad de diversión de chicos y chicas con edades entre los 6 y los 12 años, contiene una amplia variedad de juegos de aprendizaje. La misteriosa leyenda de Boaki nos habla de la existencia de varias tribus las cuales al interior del Mundo Virtual de Boaki guardan diferentes juegos educativos que son articulados de acuerdo a 3 categorías: La tribu de los kipulkai que propone juegos de astucia, la de los Manimak con juegos de reflexión y juegos de lógica y la tribu de los Griffons con juegos de memoria, donde la cultura general juega un papel importante. Para los jugadores miembros, una tabla personalizada le permite al jugador evaluar su progreso en estas tres áreas: Astucia, lógica y conocimiento.

Aprender jugando


En Panfu los niños de hoy en día pueden desarrollarse su intelecto. Los dibujos niños, que se pueden practicar a traves de una divertida e intuitiva interfaz, y el ingles para niños, que esta integrado en cada se combinan con un entretenido juego de mascotas y diversos atractivos juegos 3d: entre ellos podemos mencionar el tradicional 4 en línea, donde los niños pueden medir su inteligencia visual con otros. También el juego de geografía goza de gran simpatía entre los niños. Juegos de pandas surfistas, para medir los reflejos, o el tradicional "piedra-papel-tijera", uno de los preferidos entre los niños por ser fácil para establecer una conversación inicial. De este modo los niños se sienten atraídos por el contenido ofrecido, y esto facilita además su atención para otro contenido: el educativo. En efecto, los diversos juegos aprender, también conocidos como juegos educativos son juegos divertidos que hacen que el niño disfrute aprendiendo. No se trata sólo de educar, sino de mostrar que aprender es divertido. La meta es lograr crear un hábito en el niño en el que disfrute aprendiendo, pues ese interés propio es clave para un aprendizaje satisfactorio

Redes Virtuales Educativas



Aunque una buena parte de las noticias sobre videojuegos o juegos online que vemos, oímos y leemos giran en torno al dramatismo de unos, la violencia de otros y las temáticas o contenidos poco pedagógicos, la verdad es que paralelamente se están poniendo en marcha una buena cantidad de alternativas con una intención mucho más educativa.
Y ahora que Internet está llegando a buena parte de la sociedad en países desarrollados, surgen iniciativas que aprovechan esta plataforma para fomentar la imaginación, la creatividad, así como desarrollar las aptitudes intelectuales de nuestros niños. El juegos o plataformas virtuales online para niños.
De hecho hace pocos días acaba de lanzarse una propuesta desarrollada en Madrid: Qilania . Se trata de un mundo virtual para todos los públicos, con especial atención a los niños entre 5 y 14 años. Según sus creadores se adapta dinámicamente a ellos y vela por su seguridad.
La verdad es que estamos en una etapa histórica en la que la mayoría de los padres no han conocido en su infancia esta omnipresencia de Internet en sus vidas, mientras que sus hijos han nacido, crecen y vivirán, trabajarán y se desarrollarán con él. Hay como una especie de balanza virtual en donde pugnan la necesidad de aprender a dominar Internet por un lado y la sospecha de que al final tanto ordendador-consola-móvil puede idiotizar o impedir a nuestros chicos a que desarrollen su personalidad en la vida real ¿Dónde está el equilibrio? .
Los verdaderos pedagogos, a diferencia de quienes lo único que buscan al crear un juego es el beneficio económico, son conscientes de esta duda razonable de los padres y presentan opciones de juego en entornos que respondan a los conocimientos correspondientes a cada edad.
En un principio se desarrollaron juegos en torno a las matemáticas o los idiomas. Pero así, tal cual, no logran atraer o mantener el interés por parte de los niños. Al introducir la ambientación fantástica y el formato de juego de rol… parece que han dado con la clave. Hay algunas plataformas que cuentan con millones de usuarios . Esta es la expectativa de los creadores de Qilania, que además explican los tres aspectos diferenciadores de su propuesta:
- Incorpora una herramienta ecológica (el vitamodus)
- Sigue una historia viva, no lineal.
- Propone una adaptación dinámica (los niños juegan por grupos de edad, pues no tiene nada que ver un niño de 6 años con uno de 14).
El resto es más o menos como las demás propuestas de mundos virtuales :Avatar personalizable, tienda, mensajería instantánea, noticias (Asistente digital), chat (controlado por adultos), entorno virtual por el que pasear y relacionarse con otros usuarios, y un kit muy completo de herramientas para evolucionar: juegos, misiones individuales y de grupo, superpoderes, naves y animoticonos etc, así como personajes programados por administradores o con inteligencia artificial.
Otras plataformas interesantes, virtuales, con intención educativa y en español pueden ser Boaki  o Panfu . Ya en inglés hay otro buen montón, como Fantage  o BrainNook .
En el caso de Qilania los usuarios participan en una gran aventura con una misión bastante noble: descubrir y salvar un mundo fantástico. Tienen la posibilidad de crecer y aprender a través de la curiosidad, las sensaciones y la sensibilidad, trabajando junto a otros chavales e interactuando con ellos… y todo ello a lo largo de su infancia.
El argumento es ecológico total: derrotar a un villano que planea la construcción de una factoría de óxido nitroso que haría el planeta inhabitable.